A poco de asumir, las autoridades nos presionan con aumentos en ciertos servicios que para mucha gente resultan vitales. El más polémico y quizá paradigmático es el del SUBTE. El precio del boleto pasó de costar 1,10 a 2,50, sin anestesia. Y a raíz de ésto, algunas ONG'S como por ejemplo: Asociación Centro de Defensa Ciudadana, Ciudadanos Libres, Consumidores Libres y civiles cualunques indignados y furibundos, presentaron unos hermosos AMPAROS que la justicia tendrá el placer de pasárselos por la raja, o no. Depende del togado que nos toque: si es un hombre de bien o es un HDP.
Por su parte, los trabajadores del subte emprendieron una protesta (?) que consiste en levantar los molinetes durante las horas pico. Supongo, para solidarizarse con los usuarios por la suba del boleto. Lo que me parece, como usuario, algo re copado, pero un poco lame botas por parte de los empleados, pero mientras me beneficie, no levantaré la perdíz. Lo que sí, un consejo (aunque yo consejos no doy) amiguitos trabajadores subterráneos, como los topos: No confíen en la memoria de los pasajeros, porque esta acción solidaria se olvidará pronto, me atrevo a decir que durará lo que un pedo en un canasto, y cuando se manden alguna protesta de las suyas propias, los putearemos con las mismas, e incluso con más ganas!
La semana pasada se sumaron diferentes reclamos, algunos, me da pena decirlo, son de muertos políticos que esperan un milagro improbable. Otros, más atinados, de particulares y políticos que mantienen una mínima coherencia, caso Vilma Ripoll (hasta ahí) y Marcelo Ramal, lo que no me queda claro en este último caso es de qué ramal se trata, si el que va de Retiro a Prostitución o cuál?
En fin, este tipo de subas desmedidas, se conjugan con los veraniegos cortes de luz y otros abusos de las empresas de servicios picadoras de carne, secadoras de huevos y enfermadoras de mente, para lograr que
nuestras exiguas vacaciones nos parezcan aun más cortas, si es que eso es posible!
Salud!