La lucha por las Juntas de clasificación
En la madrugada del 2 de diciembre se aprobó el proyecto de ley para modificar el estatuto docente (30 votos a favor, 27 en contra y 3 abstenciones). Proyecto presentado por el legislador Abrevaya de la Coalición Cívica (similar al proyecto del PRO presentado inicialmente) que reduce las 14 juntas de clasificación vigentes a sólo 7, así como la capacidad de decisión de los docentes, ya que las juntas estarían conformadas, también, por funcionarios del gobierno de la ciudad (con la atribución de desempatar en caso de empate) Es una intervención directa del gobierno en el trabajo docente y las juntas elegidas democráticamente el 3 de noviembre, a lo que, cínicamente, Bullrich denominó como un proceso que “implicará "desburocratización" para la designación y ascenso de los maestros de la Ciudad de Buenos Aires” (Clarín 2-12) Es una medida que se enmarca en una política privatista que ya tiene en su haber varias ejecuciones: la evaluación docente, el cargo “maestro de maestros”, el cierre de 82 grados, el intento de designación de Abel Posse al puesto de ministro de educación y más.
Represión tercerizada
A la mañana del 1 de diciembre, en el marco de las jornadas de lucha contra la aprobación del proyecto de ley que elimina las juntas de clasificación del estatuto docente, trabajadores, estudiantes, organizaciones sociales, políticas y gremiales fuimos agredidas por una patota enviada por el gobierno porteño para sacar a los docentes de las puertas de la legislatura, bloqueada en forma de protesta. La policía dejó la zona liberada y la patota agredió a los trabajadores y estudiantes que nos encontrábamos allí protestando, permitiendo el ingreso de los legisladores porteños. Una vez garantizada su entrada, la patota se retiró impunemente en tres micros escoltados por la política federal. Repudiamos este ataque a la protesta social por parte del gobierno porteño y denunciamos la complicidad de la policía metropolitana y la policía federal.
